Acoger el relato más amplio del conflicto armado colombiano, reconocer el dolor de las víctimas, mirar críticamente la historia y nuestras responsabilidades al tiempo que miramos hacia un futuro esperanzador, son algunas de las razones.
El Informe final de la Comisión de la Verdad es el resultado de un extenso proceso de investigación y diálogo social cuyo proyecto se fijó en el Acuerdo de Paz. En él, miles de colombianos y colombianas unieron sus voces para esclarecer lo ocurrido en años de conflicto armado interno para que esta tragedia no se repita.
De esta manera, su lectura se vuelve esencial.
Reconocer el dolor de las víctimas
No podemos aceptar la alternativa de seguir acumulando vidas despedazadas, desaparecidas, excluidas y exiliadas. Escuchar y sentir a las víctimas en gran parte del territorio colombiano, quienes en el ochenta por ciento han sido civiles no combatientes, es el primer paso a la reconciliación.
Pues bien, sólo así podemos liberar nuestro mundo de las trampas del temor, las iras, las estigmatizaciones y las desconfianzas y avanzar hacia una nación distinta.
Entender nuestras responsabilidades en la perpetuación del conflicto armado
Algunos de los hallazgos y recomendaciones del informe desafían nuestras creencias y posturas, sobre todo, si se trata de comprender las responsabilidades colectivas. Ese reconocimiento hace parte de una mirada necesaria a nuestro interior que nos permita ser conscientes de los errores que como sociedad hemos cometido.
Asimismo, se hace para satisfacer una necesidad latente de apropiarnos de la historia del conflicto armado, lo que este ha representado en el desarrollo del país y las responsabilidades que tenemos como jóvenes para consolidar la paz.
Fortalecer la credibilidad en la Comisión de la Verdad
Además, sólo así se fortalecerá realmente la credibilidad en la Comisión de la Verdad, como un organismo separado de ideologías políticas o intereses individuales. Una entidad que ha aportado nuevas miradas en la gran dimensión del conflicto armado en Colombia, por medio de un panorama amplio que dignifica las historias de vida de las víctimas que sufrieron las heridas de la guerra de manera directa o indirecta. Acompáñanos en este viaje por el Informe de la Comisión de la Verdad para que descubramos juntos qué nos pasó.
Escrito por: Juan Pablo Penagos
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